En Quintana Roo, las empresas de alquiler de vehículos sufren pérdidas significativas debido al robo de autos, con un promedio de un robo diario en Cancún. Además, enfrentan la competencia desleal de rentadoras piratas que operan sin seguros, poniendo en riesgo a los usuarios. Los delincuentes venden los autos robados rápidamente con nuevos números de serie y placas, evitando ser acusados de robo. Para combatir esta situación, las empresas han implementado medidas como modificar los contratos de alquiler, solicitar datos biométricos y comprobantes de empleo, y restringir la renta de autos a connacionales. La Fiscalía ha detectado que los autos robados en Cancún son vendidos rápidamente en Playa del Carmen, lo que evidencia la organización detrás de este delito.
Con informacion de AFP News, Reportur y Telam
